Porque el tiempo no sabe que hacer con las
horas. Porque la luna no sabe que hacer con las estrellas. Y la tierra
no sabe que hacer con este universo. Entonces, ¿cómo el hombre debería
saber perdonar un error ajeno?. Si el cielo no brilla como antes, si la
noche no oscurece a tus sombras, si el viento no dobla tu rutina. ¿Cómo debería
trasmigrar el alma del dolor?. La música no apaga melodías, las lágrimas no son sólo de dolor...si las luces no se encienden en la tarde, entonces ¿qué hago yo con todo esto que siento, si lo que siento esta lejos de sentirlo, o está lejos de sentirme?.
miércoles, 14 de noviembre de 2012
lunes, 12 de noviembre de 2012
Somos una bola de emociones y actitudes que no
sabemos manejar, que no sabemos controlar. El ser humano es una bola de
emociones incontrolables. ¿Esta mal o esta bien?, solo depende del
porque. Me gustaria poder anesteciarme a diario para que las emociones
no me invadan, pero no puedo...
Recuerdo habertelo dicho pero no quisiste escuchar =).
Recuerdo habertelo dicho pero no quisiste escuchar =).
miércoles, 7 de noviembre de 2012
Más de una vez publiqué un párrafo de un texto
de Sábato que escribió acerca de la realidad del mundo de hoy. Dice
así: "La solidaridad adquiere entonces un lugar decisivo en este mundo
acéfalo que excluye a los diferentes. Cuando nos hagamos responsables
del dolor del otro, nuestro compromiso nos dará un sentido que nos
colocará por encima de la fatalidad de la historia”.
Cuántas cosas en un solo
Cuántas cosas en un solo
pedazo de oración. ¿ A cuántos kilómetros estamos de acercarnos al
dolor ajeno?. ¿Cuántas veces lastimamos a la gente sin descaro alguno y
no nos hacemos cargo del dolor que ocacionamos, de esa herida que
abrimos?. ¿Por qué muchas veces decimos: pensar antes de actuar y nunca
lo hacemos?. ¿Por qué es más fácil ensuciarse de dolor que de amor?. ¿Y
porqué en vez de pensar antes de actuar no sentimos un poco?.
Es muy fácil después de herir querer lavarse las manos, querer mentir para hacernos menos responsables y de alguna manera responsabilizar al otro en vez de a uno mismo. Ese maldito pero que nos agobia el corazón mientras que apedriamos la cabeza del otro. Igual que el todo vuelve: ¿que es lo que vuelve?, ¿por qué ese pensamiento egoista de desearle al otro que le vuelva su propio mal?. El que escupe para arriba recibe doble luego en su cráneo y seguimos cayendo en el mismo juego: maldad inconscientemente consciente.
Es muy fácil después de herir querer lavarse las manos, querer mentir para hacernos menos responsables y de alguna manera responsabilizar al otro en vez de a uno mismo. Ese maldito pero que nos agobia el corazón mientras que apedriamos la cabeza del otro. Igual que el todo vuelve: ¿que es lo que vuelve?, ¿por qué ese pensamiento egoista de desearle al otro que le vuelva su propio mal?. El que escupe para arriba recibe doble luego en su cráneo y seguimos cayendo en el mismo juego: maldad inconscientemente consciente.
domingo, 4 de noviembre de 2012
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